martes, 1 de noviembre de 2011

Humanidades





En nuestras manos 
la realidad se argumenta 
en teorías, 
y los ciclos de la vida 
se alinean como pájaros 
sincronizando las mañanas. 

Y las flores 
no son la alfombra 
adornada del crepúsculo, 
ni la estación 
en los encuentros 
de los tiempos. 

Todo es diferente, 
es la vida en su apretada 
soledad de canto, 
de almohada 
en la reliquia de los llantos.

Y todo transcurre
sin demora
en la dimensión sonora,
golpeando con fuerza
los sentidos.

Hoy, ya no somos
los humanos diferentes
de las bestias
que habitaron las comarcas.



Dariusz Zawadzki
Pintor Polaco